Qué es la plagiocefalia: cómo prevenirla, detectarla y consecuencias

La plagiocefalia postural o posicional es una deformidad craneal producida como consecuencia de la presión constante sobre una parte del cráneo, impidiendo que crezca de forma uniforme y una parte quede aplanada, lo que es una afección cada vez más frecuente, en mayor o menor medida.

Desde el año 1992 se recomienda que los bebés duerman boca arriba con la cabeza ladeada, en lugar de bocaabajo como se venía recomendando hasta entonces. Con ello, se pretendía disminuir la muerte súbita en bebés, cosa que se ha reducido en más de un 50%.

Sin embargo, al dormir boca arriba se han incrementado notablemente los casos de plagiocefalia postural en bebés. De hecho, actualmente el 47% de los bebés tienen la cabecita plana en mayor o menor grado.

Y aunque en la mayoría de casos puede ser solamente una cuestión estética, puede conllevar problemas en el desarrollo de nuestros hijos.

A continuación os explicaremos, no solo posibles consecuencias, sino también cómo ayudar a prevenir la plagiocefalia postural de los más pequeños.

¿Por qué se produce la plagiocefalia?

El cráneo de los recién nacidos es muy flexible para poder adaptarse al canal de parto y poder crecer rápidamente los primeros meses del bebé, meses en los que se produce el 70% del crecimiento de su cabecita.

Sin embargo, a pesar de lo flexible y delicado que es, los primeros meses su cabeza sufre una presión excesiva, y es que duermen 16-18 horas al día, por lo que si descansan sobre una superficie no adecuada o se hace presión siempre sobre el mismo sitio, la cabecita se aplanará, produciéndose lo que se denomina plagiocefalia postural.

Por ello, es importante evitar que pase excesivo tiempo en la silla de coche, hamacas o capazos no adecuados y en caso de lactancia cambiar el brazo y la posición para no ejercer presión siempre sobre el mismo lugar. Asimismo, contar un colchón adecuado para su cuna o mini cuna es de vital importancia.

¿Cómo prevenir la cabeza plana en bebés?

Dado que una vez que nacen la forma más común en que se produce la plagiocefalia postural, es permanecer mucho tiempo en la misma posición, lo más recomendable es variar de postura a lo largo del día.

Algunos consejos son:

• Variar la posición al dormir: Poner el bebé a dormir bocaarriba variando la posición de la cabeza cada noche, para que la presión no recaiga siempre sobre el mismo punto.
• Utiliza un colchón firme: Existen colchones específicamente diseñados para ayudar a prevenir la plagiocefalia. Los materiales como el látex o el visco se hunden y hacen que al bebé le sea más complicado moverse. Además, son menos transpirables, promoviendo el sobrecalentamiento del colchón, lo que está relacionado con la muerte súbita.

El colchón Ecus Care, es el único colchón de cuna con certificado sanitario para la prevención de la plagiocefalia y la asfixia. Su topping permite reducir hasta en un 70% la presión ejercida sobre la cabeza del bebé.

• Cambiar de lado a tu bebé durante la lactancia
• Jugar boca abajo: Cuando el bebé esté despierto, es importante colocarle boca abajo para jugar, siempre bajo la supervisión de un adulto, e ir aumentando el tiempo progresivamente. De esta manera, no solo lograremos no ejercer presión sobre la cabecita durante unas horas, sino que le ayudará a fortalecer el cuello.
• Coger en brazos o practicar porteo: para que esté en posición vertical. De esta manera aliviaremos la presión de su cabecita, al mismo tiempo que fortalecemos los vínculos con nuestro bebé.
• Evitar el uso prolongado de sillas de coche, cochecitos, hamacas, etc.

¿Cómo detectar la plagiocefalia?

Es importante vigilar el desarrollo del cráneo de nuestro bebé. Lo podéis detectar si una parte está más aplanada por un lado. Suele haber menos pelo en esa parte de la cabeza y si miras desde arriba, la oreja del lado aplanado se puede ver más adelantada que la otra.

Dado que, como hemos comentado, su cabecita crece muy rápidamente durante los primeros meses y empieza a crecerle el pelo, os puede resultar más sencillo vigilar su desarrollo tras el baño, ya que después de lavarle la cabecita tendrá el pelo pegadito al cráneo.

De todas maneras, es importante consultar todas las dudas que podáis tener con vuestro pediatra y que durante el examen físico realice un estudio visual de cráneo, cara y cuello.

Consecuencias de la plagiocefalia

Aunque en algunos casos puedes ser solamente una cuestión estética, en casos más severos puede conllevar:

• Tortículis, debido al apoyo de la cabeza predominante hacia un lado.
• Problemas oculares provocados por la desalineación ocular.
• Alteración de la mordida por problemas en la mandíbula
• Otitis, al estar presionando el pabellón auricular continuamente
• Retrasos en el crecimiento psicomotor y cognitivo, lo que puede conllevar problemas de aprendizaje y de concentración.

Es importante acudir al especialista ante cualquier indicio para confirmar el diagnóstico y seguir sus recomendaciones.

Esperamos que este post os ayudado, ¿seguís estos consejos para prevenir la plagiocefalia? ¿sabías que era la plagiocefalia? ¡Nos encantará leer vuestros comentarios y experiencias!